"Las microrredes tienen un carácter multidisciplinar, lo que hace que este tipo de proyecto solo se pueda afrontar en consorcio y cuyo resultado dependerá del grado y calidad de cobertura de toda la cadena de valor de la microrred"

Las microrredes existen desde hace décadas operando con éxito como una tecnología de nicho en zonas sin acceso a red. Recientemente la tecnología ha cambiado radicalmente su enfoque y las microrredes empiezan a visualizarse como una parte fundamental de la transformación del sistema energético.

La economía actual requiere de energía, limpia, eficiente, económica, altamente fiable y controlable localmente. Las microrredes ofrecen esta energía permitiendo que el sistema de energético sea más seguro y resilente.

Aunque el crecimiento de estas instalaciones está siendo exponencial, todavía quedan retos para alcanzar un diseño eficiente y desarrollar un control y operación de la microrred conectada o aislada de red. Debe llevarse a cabo un intenso trabajo de investigación para pasar así al concepto de “microrred avanzada”.

En esta nueva generación de microrredes, el almacenamiento de energía se ha convertido en una de las principales tecnologías facilitadoras y ha pasado a ser la clave para proporcionar un mayor número de servicios, mejor rendimiento en operación y un menor coste.

En este sentido, las empresas del País Vasco también llevan tiempo especializándose en el sector, pero para poder afrontar el cambio deben continuar innovando.